Los genes y el destino

El País vuelve a llamar nuestra atención con este interesante artículo . Link a fuente original.

El ADN no solo determina los rasgos físicos, sino también aspectos de la personalidad aunque a veces cueste admitirlo

 

 

¿Nuestro destino está escrito en nuestro ADN? ¿Somos agresivos por naturaleza? ¿Tenemos las herramientas para modificar a nuestra descendencia? Ser genetista y estudiar cómo funciona ese manual de instrucciones que es el ADN permite responder algunas preguntas sorprendentes. La genética es una disciplina que vive un auge espectacular y que cada semana nos enseña algo nuevo y relevante sobre nuestra existencia: desde el origen y curación de enfermedades hasta qué rasgos de nuestra personalidad están escritos en el ADN. Muchos de los descubrimientos son tan importantes que los científicos tenemos el deber de transferir adecuadamente, como si fuese una traducción de otro idioma,  por su transcendencia para la sociedad.

Además, el ADN es una molécula que manda mucho. A pesar de que puede resultar incómodo pensarlo, toma decisiones en muchas parcelas de nuestra vida.

En muchos aspectos, la influencia de la genética es contundente. Por ejemplo, la mayoría de nuestros rasgos físicos están en el ADN, desde la forma de las manos hasta el grupo sanguíneo.

Pero quizá lo más sorprendente sea que muchos comportamientos que no solemos relacionar de forma intuitiva con nuestra biología también están determinados genéticamente.