Hacen un llamamiento para invertir en recursos para el cuidado de la salud mental de los menores y sus familias.
Una encuesta, en la que han participado 169 psiquiatras y psicólogos clínicos, ha.analizado las consecuencias del confinamiento y constatado que la crisis sanitaria y el confinamiento ponen a prueba.la salud mental en la infancia y la adolescencia y agrava las patologías de los más vulnerables.
El impacto que la pandemia por COVID-19 ha tenido y puede tener sobre la salud mental de los niños y adolescentes no es uniforme. Dependerá de factores diversos, como fallecimientos de seres queridos, separaciones.de sus cuidadores por causas laborales o de aislamiento obligados por contagio, trastornos mentales de base y vulnerabilidad personal. Una encuesta en la que.han participado 169 psiquiatras y psicólogos clínicos, promovida por la.Plataforma de Asociaciones de psiquiatría y psicología Clínica por la Salud Mental de la infancia y adolescencia, pone de manifiesto.que los menores más vulnerables a los cambios de rutina y/o con necesidades de apoyo social, como son los niños y las niñas con trastornos del neurodesarrollo de mayor gravedad o aquellos en situación de violencia intrafamiliar, han sufrido especialmente las consecuencias del confinamiento.
También señala que cualquier niño o adolescente puede manifestar.transitoriamente síntomas de ansiedad o depresión como consecuencia de la crisis que estamos viviendo. Estos síntomas pueden.ser una respuesta normal y adaptativa a los cambios sufridos.
Ya hay consecuencias de la crisis.
Los profesionales de la salud mental constatan que.esta situación ha tenido ya consecuencias en las dinámicas sociales y que va a influir en la forma de expresar el malestar emocional y la enfermedad mental, así como en la manera.de atenderla, especialmente en grupos vulnerables como son los niños y adolescentes. Por ello, han asumido la responsabilidad de profundizar en el conocimiento.de la influencia que esta situación puede tener en la atención sanitaria específica en salud mental que ha de proporcionarse.