Miguel Guerrero Díaz

Escribía Miguel Guerrero Díaz en su twitter que tenía pendiente un hilo sobre población de riesgo al #suicidio. Aquellos grupos vulnerables de mayor fragilidad (que no debilidad) que requieren una atención y cuidado especial por parte del sistema social y sanitario.

Os lo mostramos a continuación.


.

Por edad, las personas mayores constituyen un verdadero grupo de riesgo. A mayor edad, mayor riesgo suicida. El aislamiento, soledad, deterioro físico y/o mental y las pérdidas de autonomía, capacidad o salud son factores de riesgo FR) en este grupo etario.

La población joven de entre 15 a 29 años. La principal causa de muerte global en esta franja es precisamente el #suicidio. FR: la presencia de psicopatología clínica, consumo de tóxicos, la supuesta menor capacidad de gestión emocional del estrés.

Las personas que padecen una enfermedad médico-quirúrgica. 1/3 de los fallecidos por #suicidio padecían una. Sobre todo aquellas que cursan con dolor crónico, incapacitantes o pronóstico grave.

Cuando además padecen depresión, mayor riesgo.

Las personas con consumo abusivo y/o dependiente de drogas (especialmente el alcoholismo) o aquellos que padecen patología dual (adicción más trastorno psíquico) presentan + riesgo al suicidio. Su abordaje es complejo y necesariamente multidisciplinar.

Un colectivo de especial vulnerabilidad son las personas con diagnóstico de trastorno mental o psicológico. 1/4 sufren ideación suicida en algún momento de su proceso terapéutico. La carga de dolor mental más estado de desesperanza, mayor riesgo.

Personas víctimas en etapas previas de violencia, traumas, abusos o maltratos (de cualquier índole) presentan una especial vulnerabilidad para conducta suicida posterior.

Apego inseguro, desregulación emocional y sentimientos negativos, variables mediadoras.

Colectivos en riesgo o exclusión social presentan tasas de conducta suicida superiores (ideas, intentos y muertes). Minorías étnicas, migrantes, LGTBI, personas sin hogar, etc.. merecen una asistencia y cuidado preferente por el alto grado de dolor social.

Los integrantes de las fuerzas de orden público suponen un grupo de riesgo. No solo el acceso a armas supone un motivo de mayor riesgo. Además presentan varios factores de riesgo que merecen una atención especializada.

La población reclusa de nuestros centros penitenciarios también constituyen una población de riesgo al suicidio. Es muy importante disponer de protocolos operativos para garantizar la salud mental, la prevención del suicidio y reducción del consumo de drogas.

Por profesiones, el personal sanitario (y más en el contexto de pandemia vivida) son un colectivo de riesgo a cuidar. La primera línea de atención (UCI, urgencias, Neumología, Interna, etc) ha sufrido mucho y la ideación suicida se ha incrementado.

Los sobrevivientes COVID19 deben considerarse ya, a mi juicio, en estos grupos de riesgo suicida. El impacto emocional percibido, la incidencia de trastornos psicológicos, el miedo y los síntomas resistentes pueden suponer un factor de riesgo añadido.

Los supervivientes de suicido.

Familias y allegados de un ser querido fallecido por #suicidio. En muchos de ellos la idea suicida es frecuente debido al dolor insoportable del duelo y/o el deseo de reunirse con su ser querido.

¡ Todos ellos merecen asistenta sanitaria !


Texto extraído del twitter de Miguel Guerrero Díaz https://twitter.com/upii_ciceron/status/1443956781856788480?s=24. Una estrategia preventiva básica (selectiva) consiste en la valoración sistemática del riesgo suicida en estos colectivos vulnerables.

estrategia preventiva básica ante el suicidio